6.8.08

CENIZAS

He visto abrirse mis ojos y apenas logro ponerme de pie, quiero estar en el mundo de las fantasías y sueños de charol, apenas logro nombrar algo inaudible en este trance de días y horas momentáneas, de sueños y lugares inefables. Hoy apenas puedo con mis pies de plomo que se dispara por momentos y por momentos siento una extraña sensación que me recorre las tres formas en que me disperso y los veinticuatro laberintos que recorro a diario. Decir que podré hablar ya es mucho, pero ni eso, ni las palabras acudirán a mi encanto, ni mis ideas vendrán a mi entierro, apenas habrá una porción de cielo que se irá cubriendo lentamente o talvez el viento de occidente de aquel lugar donde aprendí a quemar palabras y caminar por ayeres flotando en lo alto de los cipreses, me suplante. Hoy estoy aquí, derrotado por las tragedias conceptuales. Vasos de ausencia delatan mis ganas de sentir caricias en la punta del alma y en el centro de la piel, gotas de licor fermentado, cansancio salado, suerte de echar los dados...

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